Elaboración de un plan de tratamiento

Usted y su proveedor de atención médica decidirán el plan de tratamiento más adecuado para usted. El plan puede incluir uno o varios de los siguientes puntos:

• Evitar el alcohol. El consumo abundante de alcohol puede dañar el hígado. Una vez que se daña el hígado, una pequeña cantidad de alcohol basta para causar problemas. Usted también puede retrasar el avance de la cirrosis si deja de tomar alcohol. 

• Tomar medicamentos. Es posible que deba tomarlos para tratar algunas de las causas de la cirrosis. Estas incluyen infección o bloqueo de un conducto biliar. Por ejemplo, la hepatitis C ahora puede curarse con medicamentos. También puede llegar a necesitarlos si su sistema inmunitario está atacando el hígado o los conductos biliares. Con la cirrosis, también se deben evitar otros medicamentos. Estos incluyen los antiinflamatorios no esteroides (AINE), como el ibuprofeno y el naproxeno.  Los AINE pueden causar daños renales en las personas que tienen cirrosis.

• Tratar los síntomas. La cirrosis puede causar hinchazón del estómago y las piernas. Hacer una dieta con poco contenido de sal puede ayudar a aliviar este síntoma. Manténgase por debajo de los 2.000 mg de sodio por día. También pueden recetarse diuréticos para ayudar a aliviar la hinchazón. La cirrosis también puede causar confusión mental. Para esto, se usan medicamentos.

• Comer alimentos saludables

• Bajar el exceso de peso Esto es especialmente importante si usted tiene sobrepeso, diabetes, presión arterial alta o colesterol alto y triglicéridos altos. Si controla estas afecciones puede retrasar el empeoramiento de la cirrosis. Hacer actividad física puede ayudarlo a adelgazar. 

• Extraer el hierro de la sangre. En ocasiones, la cantidad de hierro que hay en el hígado es mayor que la normal. Su proveedor de atención médica puede eliminar el hierro excedente de la sangre.

Los casos graves de cirrosis pueden requerir tratamientos especiales. Usted puede analizarlos con su proveedor de atención médica.

Vacunas

Pregúntele a su proveedor de atención médica sobre las vacunas recomendadas. Estas incluyen las vacunas para virus que pueden causar enfermedades hepáticas.

Evite beber alcohol

El consumo de alcohol puede destruir células hepáticas. Si tiene problemas para dejar el alcohol, pida ayuda a su proveedor de atención médica para recibir el apoyo que necesita. El proveedor puede sugerirle grupos locales que pueden ayudarlo a dejar de beber alcohol.